Descripción enviada por el equipo del proyecto. Obra sustentable construida con estructura y envolvente de materiales 100% reciclados
La obra se desarrolla en un terreno de 2500 m2, ubicado en camino a Isla de Maipo en la localidad de Talagante región metropolitana chile, inserto dentro de un predio rural en una zona de grandes extensiones de sembradíos, por lo que presenta visuales hacia el nororiente y norponiente, de largo alcance, en un sitio sin pendientes.
El encargo consistía en realizar una vivienda unifamiliar, con la utilización de materiales de construcción reciclados. Se contaba principalmente con vigas IPE y canal C metálicas y cristales termo-panel de distintas dimensiones.
Tomando en cuenta el sector rural donde se emplaza la obra, se optó por generar un arquetipo que se sitúe de manera armónica, ajustada y no invasiva en el sitio. El fundamento se constituyó bajo la premisa de trasladar segmentos de áreas verdes, hacia el interior de la vivienda.
La idea principal se basaba en la creación de una primera planta libre completamente acristalada y permeable hacia el exterior, compuesta por tres espacios principales y organizados para dar cabida a tres funciones distintas de la casa: cocina-comedor y living.
Sobre esta base transparente de dispuso una segunda planta apostada de manera suspendida, esta se compone de dos elementos principales estratégicamente orientados que se abren hacia las distintas vistas del norponiente y nororiente con la idea de captar la mayor cantidad de asoleamiento y visuales.
Para la fachada sur, los materiales disponibles dieron la posibilidad de componer una gran envolvente acristalada que promueve una continua ventilación cruzada entre ambas fachadas transparentes norte y sur, de la misma forma se busca otorgar luz natural para la mayoría de los espacios interiores de la vivienda, mediante este gran muro cortina.
Para el revestimiento exterior, con el claro objetivo de arraigar la vivienda al lugar, ambicionando entablar un dialogo con el entorno verde en una constante búsqueda por no interferir en el paisaje, se optó por la generación de muros verdes verticales alternando madera con vegetación similar a la existente en el predio.
Aprovechando la amplitud espacial del entorno inmediato en el cual se emplazó el proyecto, era incuestionable la utilización de la cubierta o quinta fachada como terraza -mirador de un paisaje privilegiado con visuales y perspectivas de largas distancias. Para poder realizarlo, se optó por la fabricación de cerchas reforzadas con costaneras metálicas 80x40 en 3mm, de esta manera se logró dar resistencia a la colocación de los pallets ya disponibles de 120x100, los que descansarían por encima de la cubierta revestida en plancha cinc-alum 5v.
